2. LLAMAR A LOS PROVEEDORES DE TU BODA
No lo hagas! Delega esta tarea en tu wedding planner, ella se ocupará de todo y de esta manera podrás disfrutar mucho mejor de todos los momentos previos a la ceremonia. Relájate mientras te peinan y maquillan, déjate mimar.
3. PREOCUPARSE
Lo sé, a veces es inevitable, pero el día de tu boda no es el más indicado para estar preocupada. Todo saldrá perfecto, confía en los profesionales que tienes a tu lado. ¿Estarán los detalles en su sitio? Has delegado todas esas tareas en tu wedding planner, ella sabrá tenerlo todo a punto, tal y como tú lo has decidido.